UN LUGAR ESPECIAL EN PALMA

 El parque de Sa Riera está ubicado cerca del centro de Palma de Mallorca. Este lugar fue construido para los vecinos de Palma en el año 2007 y está abierto desde las 8 de la mañana  hasta las 10 de la noche.

 Es uno de los parques más grandes de la isla y en el que se realizan un mayor número de actividades para todo el mundo. Es ideal para ir a correr, jugar al fútbol y también tiene una pista de "skate". Además puedes encontrar máquinas para hacer ejercicio y hay carriles para montar en bicicleta.

 También hay zonas para que los niños puedan hacer distintas actividades y para que las personas mayores disfruten de un espacio para plantar sus verduras y hierbas medicinales. Debido a su amplitud, este parque es utilizado para pasear a los perros y muchas cosas más.

 

 

UN LUGAR ESPECIAL EN MOSCÚ de OLGA KURBATOVA

 ¿Qué imaginas cuando te dicen "Moscú"? Seguramente la Plaza  Roja y el Kremlin. Estos son los  primeros sitios que visita cada turista. Después visitará las calles más céntricas y nuestros famosos museos. Y si te sobra tiempo y quieres ver un poco de la naturaleza rusa, sin salir de la ciudad, que sepas que también hay un lugar para ello. Es el parque "Fili". Es más como un bosque que un parque, desde el punto de vista de un español. Está situado cerca del centro de la ciudad, puedes llegar en solo veinte minutos en el metro. 

 Antes, esta zona era un pueblo a las afueras de Moscú que era la residencia veraniega de la familia noble Naryshkin. La casa aún está allí, aunque sufrió un incendio en el año 2014.  En ella estuvo la emperatriz Ekaterina (Catalina), la Grande y el emperador Alexander II con su esposa la emperatriz María Alexandrovna. El parque está situado a las orillas del río Moscova, así que puedes pasear por el malecón, tomar el sol en la playa en verano, caminar por el bosque (en el que hay senderos asfaltados y un par de cafés), dar de comer a las ardillas y a los carboneros comunes. 

 La naturaleza de esta zona es preciosa y la admiraron los más famosos artistas rusos, escritores como Lermontov, Tolstoi, Ogarev... pintores como Vrubel, Savrasov... y el compositor Tchaikovsky. En el siglo XX, Fili ha cambiado mucho. Ya no tenemos la tranquilidad y la soledad de los siglos pasados, porque es un parque público y muy popular y lo visita mucha gente. Pero se ha preservado su belleza y vale la pena visitarlo. 

UN LUGAR ESPECIAL EN UCRANIA

 En el pueblo donde creció mi madre, se encuentra una finca que fue propiedad del duque Nikolai Nokolaevich Arcas. Este duque fue escritor, compositor e historiador de la cultura ucraniana e íntimo amigo del emperador de Rusia, el zar Nikolai II.

 Dentro de la finca hay una gran mansión construida a finales del siglo XIX, que después de la Segunda Guerra Mundial pasó a ser un colegio de enseñanza pública. En ella hay un museo dedicado a la vida, las obras, el mobiliario, los trajes y vestidos del duque y su familia.

 El museo fue ampliado para reflejar la evolución de la sociedad en el mismo pueblo y en él se encuentran los recuerdos y medallas de los soldados y oficiales que sirvieron al país y que nacieron en el mismo pueblo.

 Quiero destacar un apartado destinado a la evolución de la gente del pueblo de donde es mi familia. Hay fotos de mis abuelos desde que eran jóvenes hasta el final de sus días. También hay de mis padres y de mis tíos en su etapa escolar. Este museo para mí es un lugar especial y cada vez que voy al pueblo, lo visito porque cuando entro en él pierdo la noción del tiempo y del espacio. Puedo viajar a otra época y puedo vivir como si de un sueño se tratara siendo yo la protagonista. 

 

 

 

LUGARES ESPECIALES EN LOS PUEBLOS DE MOLDAVIA de ANA MARIA POPOVICI

"Hay un lugar

en el cielo nacido,

sin montañas, sin mar,

pero dulce y querido."

 Hay muchos lugares en nuestro mundo en el que abundan los turistas, porque se habla de ellos y se hace una publicidad continua. Sin la menor duda, seguro que aquellos sitios son hermosos e interesantes; pero, ¿por qué nos limitamos? La tierra está llena de maravillas, de lugares que tienen una belleza indescriptible y todos son prácticamente desconocidos.

 En el siglo de la velocidad loca, del cambio ininterrumpido, necesitamos más que nunca descansar en lugares tranquilos y aislados. Si quieres un refugio para tu mente y alma, sin millones de ojos y bocas que te molesten, lo encontrarás en los pueblos de Moldavia. 

 ¡Imagínate! Te levantan por la mañana los trinos de los pájaros, el murmullo del río, la melodía de las hojas acompañadas por el viento... En pocas palabras, te despiertas en manos de la naturaleza. Todo eso se prolonga durante el día, porque nosotros tenemos un dicho: "Si va a ser un buen día lo sabrás desde bien temprano por la mañana."

 ¿Qué puedes descubrir en nuestros pueblos? La vida de los campesinos y su habilidad para hacerlo todo con sus propias manos, la naturaleza, plantas increíbles cuya belleza culmina en desfiles de moda por el bosque; ríos grandes que te pueden hacer de guía a lo largo  del país; la comida tradicional con sabor a anhelo; la sencillez y la hospitalidad de la gente que tiene solo un pan en su casa y lo comparte contigo porque se alegra de tu presencia. 

 Todo esto y mucho más te está esperando en los pueblos de Moldavia. ¡Comienza la aventura de tu alma, de tu vida, hoy mismo y visítalos!

 

 

UN LUGAR ESPECIAL EN MOSUL de WAAD

                            Las orillas del río Tigris

  Es uno de los sitios más bonitos de Irak, especialmente en mi ciudad: Mosul. 

  Es uno de los ríos que pasan por Mosul. Es muy bonito, tranquilo, la gente va allí para relajarse. En las orillas hay cafés y restaurantes para que la gente pueda sentarse y comer mirando el paisaje, la naturaleza. Antes la gente iba con su familia a pasar un rato cada fin de semana, pero hoy en día este sitio está abandonado por culpa de la falta de seguridad, de la guerra y ya nadie de la ciudad ni los turistas van allí.

 En el río viven muchos tipos de peces, por eso la gente iba a pescar y a nadar, aunque era peligroso nadar en el río. Al lado hay parques infantiles para que los niños puedan jugar bajo la mirada atenta de sus abuelos que disfrutan de sus nietos y pueden leer, pasear y llevar una vida propia de su edad.

 En este río, pasa un  puente porque el río viene cargado de agua. En esta zona hay muchos árboles como palmeras, datileras y otras especies vegetales propias del clima.

 

 

 

UN LUGAR ESPECIAL EN VENECIA de RICHARD REICHHOLD

 De joven viví unos diez años en una ciudad amurallada al norte de Venecia. Mi casa era el último piso de un edificio deteriorado en el casco antiguo. 

 Siempre recordaré esa mañana helada de invierno cuando unos gritos me despertaron al amanecer. Los gritos venían de la calle: "¡Pescado fresco, pescado fresco!", decían. 

 Decidí investigar, así que salí por las calles adoquinadas siguiendo los gritos que se oían cada vez más fuertes. Sin saber por dónde andaba, de repente me encontré delante de un gran arco de piedra esculpida. A un lado estaba la figura de Neptuno y al otro, una sirena gigantesca. Pasé por debajo y, al pasar por un puente de hierro, vi un escenario en ebullición: había un mercado en marcha. Era un mercado de pescado situado en una isla pequeña en medio de canales que estaban llenos de truchas. 

 La forma de la isla recordaba a una barcaza y, alrededor, se encontraban puestos distintos de pescado y mariscos frescos.  A la salida del mercado había otro puente y a un lado había un molino antiguo de madera. 

 

 

UN LUGAR ESPECIAL EN MI CIUDAD de SOSINKA ENA

 En mi país vivo en una área industrial. Es un área desde la que puedes llegar al centro de la ciudad sin darte cuenta. El desarrollo de la industria pesada provocó la destrucción de la naturaleza. La gente no venía a este lugar buscando rincones hermosos, sino en busca de trabajo.  Al final la gente vivía en grandes bloques grises bajo un cielo gris. 

 En los últimos veinte o treinta años todo ha cambiado mucho. Muchas de las minas, herrerías y fábricas han sido cerradas. Eso ha cambiado el entorno. Ahora bajo el cielo azul se pueden encontrar hermosos parques verdes, museos interesantes... Por ejemplo, se pueden visitar las minas de carbón. 

 Solamente en mi pequeña ciudad, donde viven dieciséis mil habitantes, hay dos museos: el museo del pan y un museo sobre la deportación a Siberia durante la Segunda Guerra Mundial. En la colina que domina la ciudad, tenemos un parque botánico. Dos veces a la semana, en una plaza podemos disfrutar de un gran mercado. Vienen muchas personas de ciudades cercanas. En mi ciudad se organizan muchos eventos deportivos y culturales. 

 Pero yo, como soy un tipo solitario, prefiero el silencio y los lugares apartados. Mi lugar favorito es un antiguo camino que conduce a la ciudad vecina. A ambos lados del camino crecen viejos árboles. Sus copas están en contacto y forman un túnel.

 En cada estación del año, el camino es diferente. En primavera huele a jóvenes hojas. En verano, da mucha sombra y puedes descansar de las altas temperaturas. En otoño parece un camino de oro por el color de las hojas de los árboles. En invierno...mmm... en invierno si no hay nieve prefiero quedarme en casa, debajo de una manta y mirar el fuego de la chimenea. 

 

 

UNA RECETA DE CHRISSIE HIRST

        Una receta tradicional de Gran Bretaña: "Toad in the Hole".

                      (Traducido como "Sapo en el agujero" )

 “Toad in the Hole” es un plato clásico de la cocina de Gran Bretaña. Es una receta típica de invierno, hecho de un tipo de tempura de huevos y harina y salchichas. Es muy simple y es un buen plato para tomar cuando hacer frío fuera. Esta receta consiste en cocinar las salchichas y tempura en un recipiente de horno grande para servir a toda la familia. También se puede hacer en tamaño individual.

 No se sabe bien de dónde viene el nombre de este plato pero se supone que es porque la carne que usaban para hacer salchichas hace muchos años era diferente de las salchichas de hoy  y  parecían "sapos" escondidos en la tempura. Es una receta muy antigua que fue publicada por primera vez en un libro que se llamaba The  Art of Cookery  (El arte de la cocina) en 1754. En esta época  era una receta en la que se usaban  muy pocos ingredientes, porque la comida no era tan abundante como hoy en día y todavía sigue siendo un plato muy popular en Gran Bretaña (y en mi casa) más de 250 años después.

 Ingredientes (para 4 personas):

• 4 huevos camperos

• 200ml leche 

• 200g harina 

• Una pizca de sal marina

• 75ml de aceite de oliva

• 8 salchichas 

¿Cómo se hace?

1. Calienta el horno a 250 grados.

2. Pon los huevos, la leche, la harina y la sal en un recipiente para mezclar y usa una batidora eléctrica. Bátelo hasta que tenga una consistencia de nata, espesa, cremosa y  sin grumos. Deja la mezcla reposar unos 30 minutos. 

3. En un recipiente para el horno, pon el aceite y añade las salchichas. Mételo en el horno hasta que el aceite esté muy caliente, que salpique pero que no se queme.

4. Con mucho cuidado, vierte la mezcla de harina, huevos … al aceite caliente y las salchichas. Ponlo otra vez en el horno y déjalo que se haga durante 25 minutos más o menos, hasta que haya subido y esté dorado. NO hay que abrir el horno durante este tiempo.

 5. Una vez cocinado, sácalo del horno, córtalo en trozos y sírvelo con verduras y una salsa de carne.

 Para una versión vegetariana solo tienes que usar salchichas vegetarianas, son muy fáciles de conseguir, se pueden comprar en Aldi.

      
 Chrissie Hirst.